Las cinco claves del progreso en ajedrez

La pregunta del millón sin lugar a dudas es la siguiente: ¿cómo progresar en ajedrez? Puede parecer que no hay una respuesta única, y que en parte dependa de el nivel, pero esto no es del todo cierto. Es obvio que el nivel influye a la hora de tomar un entrenamiento o de plantearse unos objetivos. Por ejemplo, un jugador de 2300 no puede seguir las mismas pautas y objetivos que un jugador de 1800. Pero el protocolo para mejorar su nivel es más similar de lo que a simple vista pueda parecer.

En este artículo voy a dar algunas claves del progreso en ajedrez que yo mismo utilicé para lograr subir escalones. Así es como pasé desde 1800 de Elo a 2400 y mi obtención del título de Maestro Internacional.

1: Practica la autocrítica.

A lo largo de nuestra vida ajedrecística, hemos disputado miles y miles de partidas de ajedrez. No es raro ver a algunos jugadores que muestran a sus amigos sus mejores victorias, sus entregas más apasionantes, o los finales que con mayor técnica han manejado. Sin embargo, ¿este ejercicio de recreación ayuda realmente a mejorar?

Cuando mostramos una obra de arte propia mejoramos nuestra autoestima con los elogios recibidos. Los beneficios a nivel técnico son escasos, pues al fin y al cabo estamos dando vueltas en círculos sobre un mismo eje (la misma partida). Aun sabiendo que hemos jugado muchas de ellas, recordamos siempre un diminuto porcentaje de las mismas. Lo peor es que muchas veces ni siquiera nos damos cuenta de que están lejos de ser perfectas, y que tal vez con una mejor resistencia de nuestro rival habría sido imposible ganar esa partida.

¿Qué hay de las derrotas? Una sensación muy común es la gran amargura que se siente cuando se pierde una partida, casi traumática. Seguramente te has esforzado muchísimo durante unas cuantas horas en jugar una partida y el esfuerzo no ha dado sus frutos. Pero, cálmate amigo mío, ignorar una derrota no es más que la receta perfecta para cosechar más de éstas. ¡Pregúntate qué ha pasado en la partida y no temas al mostrarla a otras personas! Puede que tú mismo no encuentres la clave de tu derrota, pero un compañero que tiene el poder de la perspectiva sí. Disfruta de tus victorias y aprende de tus derrotas para conseguir más de las primeras.

2: Cómo progresar en ajedrez analizando tus partidas.

Sin lugar a dudas, esto fue lo que más hizo que progresara en cualquier etapa de mi evolución ajedrecística. No hay nada como analizar tu propio juego. Recomiendo férreamente que primero realices un análisis sin módulo y luego hagas las comprobaciones pertinentes con él.

Recopila todas las partidas que juegues en los torneos. Incluso en las sesiones por internet, puedes guardar las que te parezcan más significativas. Analízalas con objetividad, escribe tus pensamientos de cada posición durante la partida. Luego pasa la prueba del algodón y corrige con el módulo. Tal vez no notes grandes cambios al principio, pero te invito a valorar tus comentarios más antiguos y a observar tu propio progreso.

3: Mejora tu técnica en los finales y medio juego

Hay mucha confusión en este punto. La mayoría de nosotros (yo no me escapé de este error en su momento), cogemos los libros y los estudiamos como si tuviésemos que memorizarlos. Esto es un error, ya que el ajedrez no es un deporte puramente de memoria.

Cuando cogemos un libro, se trata de saber aplicar los conocimientos adquiridos. A esto es a lo que se le llama “técnica ajedrecística”. Es muy importante conocer los finales básicos, las estructuras del medio juego típicas, los planes más comunes de la posición, etc. Pero también lo es mejorar nuestra comprensión en estas partes del juego. Como entrenamiento imprescindible, hay que practicar los ejemplos estudiados. Esto puede tratarse desde jugar un final teóricamente superior contra el módulo a una posición con ventaja estructural.

4: Realiza táctica regularmente.

Si eres un jugador ambicioso, y con muchas ganas de mejorar, no hay excusa entonces. Realizar táctica regularmente debe de ser como cualquier otra tarea diaria. Prácticamente todos los Grandes Maestros coinciden en que es imposible ganar una partida puramente por estrategia.

Guardar todos los problemas de táctica donde has fallado es un hábito excelente. Examina el motivo táctico que se te ha escapado, ponle un nombre y archívalo. Con el tiempo tendrás una gran base de ejercicios. Podrás ver en qué temas tácticos fallas más habitualmente y reforzarlos. Recuerda que los errores tácticos no son “descuidos”, sino carencias en el juego. Magnus Carlsen puede dejarse el boli más veces que nosotros en la sala de juego, pero se dejará menos horquillas.

Puedes realizar este ejercicio cómodamente por Internet. El equipo técnico de ChessAndMind está trabajando en mejorar nuestro propio entrenador de táctica. Tampoco descarto el método tradicional, con tablero y libro. Un buen libro de táctica en la mesita de noche puede ser un excelente compañero de sueño.

5: Crea un repertorio de aperturas sólido.

Y cuando digo sólido no me refiero al estilo de las aperturas que debes elegir, sino a que no lo cambies constantemente: perfecciónalo. Estudia aperturas y guarda tus análisis. Luego comprueba tus resultados en las partidas y en base a ellas, mejora tus apuntes.

Sorprender en la apertura tiene ventajas, pero tampoco hay que subestimar ser un gran conocedor de tu apertura. No está de más estudiar todo tipo de líneas de juego, y abrir tu mente a estructuras nuevas. Pero el tiempo es limitado, y la teoría de aperturas es abrumadoramente grande. Por eso hay que elegir cuidadosamente algunas líneas de juego y “hacerlas nuestras”

Por supuesto, nombrar que lo ideal es que un entrenador supervise tu entrenamiento. De todos modos, perfeccionando por ti mismo los puntos anteriores puedes conseguir resultados muy satisfactorios.

Maestro Internacional Eric Sos Andreu (contactar)